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Dra. Lorena Constanza Ortega Ferrand Inequidad de Género en la Investigación Educativa en Chile
En Chile, un nuevo estudio sobre investigación educativa revela alarmantes desigualdades de género que afectan la productividad científica y la colaboración internacional. Investigadores del Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE) de la Universidad de Chile, junto a las universidades de Tarapacá y Mayor, analizaron datos bibliométricos de 5.702 autores que publicaron en revistas indexadas en Scopus entre 2011 y 2021. Los resultados, publicados en el Journal of Diversity in Higher Education, indican que las mujeres investigadoras enfrentan un riesgo 22% mayor de deserción académica, especialmente al inicio de sus carreras. Además, se evidenció una brecha de género en la publicación científica: las mujeres publican en promedio un 21% menos artículos científicos que sus colegas hombres, una disparidad que se intensifica con los años de experiencia. Si bien no se observaron diferencias significativas en el liderazgo de proyectos (medido por la frecuencia de primeras autorías), la colaboración internacional se ve afectada, ya que las investigadoras chilenas tienden a colaborar más a nivel nacional, limitando su visibilidad y acceso a redes internacionales. Ante esta situación, se enfatiza la necesidad de implementar políticas científicas que promuevan la equidad de género en la academia. Entre las medidas propuestas, se destacan programas de apoyo para la retención y productividad de investigadoras jóvenes, así como iniciativas que fomenten la colaboración internacional y un reparto equitativo de las tareas académicas. Estas acciones son cruciales no solo para el desarrollo profesional de las mujeres, sino también para el avance del campo de la educación en su conjunto.

Un estudio científico ha identificado desigualdades de género en las trayectorias de investigadores en educación en Chile. Se analizaron datos de 5.702 autores que publicaron artículos en revistas indexadas en Scopus entre 2011 y 2021.

    El estudio se centró en:
  • la productividad científica,
  • la deserción académica,
  • el liderazgo en la investigación y
  • la colaboración.
  • Los resultados muestran que, a pesar de una representación inicial similar entre hombres y mujeres, las investigadoras enfrentan mayores obstáculos. Este estudio aporta evidencia sobre las barreras que limitan el desarrollo profesional de las mujeres en la academia chilena. La persistencia de la inequidad de género en la investigación educativa chilena exige la implementación de políticas científicas que aborden esta problemática. Asimismo, es crucial promover la colaboración internacional de las investigadoras chilenas y un reparto equitativo de las tareas académicas para impulsar la equidad y el desarrollo del área.

    Este estudio sobre la inequidad de género en la investigación educativa en Chile fue realizado por un equipo de investigadores del Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE) de la Universidad de Chile, en colaboración con académicos de las Universidades de Tarapacá y Mayor. La autora principal, Dra. Lorena Constanza Ortega Ferrand, investigadora del CIAE, destaca la importancia de abordar estas brechas de género: “Estas brechas de género, que se explican por diversas barreras estructurales y culturales a las que se enfrentan las investigadoras, tienen importantes consecuencias para la promoción académica de las mujeres, y para el desarrollo del campo de la educación en su conjunto". El equipo analizó datos bibliométricos de 5.702 autores que publicaron artículos científicos en revistas indexadas en Scopus durante una década, con el objetivo de comprender las dinámicas de género en la publicación científica, la colaboración y la deserción académica en este campo.

    Esta investigación científica se centró en analizar las desigualdades de género en la academia chilena, específicamente en su impacto sobre la productividad científica y la colaboración en investigación educativa. Chile, con un creciente panorama de producción científica en ciencias sociales, fue el contexto elegido para este estudio. Mediante el análisis de datos bibliométricos de autores afiliados a instituciones chilenas, se indagaron las dinámicas de género en la academia nacional. Los resultados obtenidos evidencian las barreras que enfrentan las mujeres investigadoras en este contexto, tales como la deserción académica y las dificultades para acceder a redes de colaboración internacionales.

    El estudio sobre la inequidad de género en la investigación educativa en Chile analizó un periodo de 10 años, comprendido entre 2011 y 2021. Durante este tiempo, se examinaron datos bibliométricos de 5.702 autores que publicaron artículos científicos en revistas de educación indexadas en Scopus. Este periodo de análisis permitió a los investigadores evaluar las tendencias en la productividad científica y la colaboración de hombres y mujeres en la academia chilena, identificando las diferencias en las trayectorias profesionales y el impacto de las desigualdades de género a lo largo del tiempo.

    Este estudio sobre la inequidad de género en la investigación educativa chilena tiene importantes implicaciones para la política científica y el desarrollo del campo. Visibilizar las barreras que enfrentan las mujeres en la academia, como la mayor probabilidad de deserción académica y la menor productividad en términos de publicaciones científicas, es fundamental para diseñar estrategias que promuevan la equidad de género. Las desigualdades de género no solo afectan las trayectorias individuales de las investigadoras, sino que también limitan el avance del conocimiento en el campo de la educación. Al reducir la diversidad de perspectivas y experiencias en la investigación, se limita la capacidad de generar soluciones innovadoras a los desafíos educativos. Promover la equidad a través de políticas que fomenten la retención y la colaboración internacional de las investigadoras, así como un reparto equitativo de las tareas académicas, es crucial para fortalecer la investigación educativa y construir un sistema científico más justo e inclusivo.

    El propósito de este estudio es generar conocimiento sobre las desigualdades de género que afectan las trayectorias de investigadores en el campo de la educación en Chile. A través del análisis de datos bibliométricos de autores chilenos que publicaron artículos científicos en revistas indexadas en Scopus, se busca identificar las barreras que limitan la productividad científica, la colaboración y la promoción académica de las mujeres. El objetivo final es informar la creación de políticas científicas que promuevan la equidad de género en la academia, contribuyendo a un sistema de investigación más justo, diverso e inclusivo.

    Para analizar las desigualdades de género en la investigación educativa en Chile, el equipo de investigación empleó una metodología cuantitativa basada en el análisis de datos bibliométricos. Se recopilaron datos de 5.702 autores que publicaron artículos en revistas de educación indexadas en Scopus entre 2011 y 2021. Se utilizaron análisis de supervivencia, regresión de Poisson y análisis de redes sociales para examinar patrones de deserción académica, productividad científica (medida por el número de artículos publicados), liderazgo en investigación (primeras autorías) y coautorías. Este enfoque metodológico permitió al equipo identificar diferencias significativas en las trayectorias profesionales de hombres y mujeres en la academia chilena.

    La Dra. Ortega Ferrand, investigadora del Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE) de la Universidad de Chile y autora principal del estudio, destaca las consecuencias de la inequidad de género en la investigación educativa: "Por esto, es necesario diseñar y aplicar políticas que fomenten la retención, productividad y visibilidad de investigadoras jóvenes y que promuevan equipos de investigación con diversidad de género y experiencia". Ortega subraya la necesidad de diseñar políticas que promuevan la retención, la productividad y la visibilidad de las investigadoras jóvenes en Chile. Además, enfatiza la importancia de fomentar la diversidad de género en los equipos de investigación para enriquecer el campo de la educación.

    A partir de los hallazgos de este estudio, se abren nuevas líneas de investigación y acción para combatir la inequidad de género en la academia chilena. Es crucial profundizar en el análisis de las barreras estructurales y culturales que limitan la participación de las mujeres, especialmente en las etapas tempranas de sus carreras. Se requiere diseñar e implementar políticas científicas que promuevan la retención de las investigadoras, faciliten la colaboración internacional y garanticen un reparto equitativo de las tareas académicas entre hombres y mujeres. Estas acciones son fundamentales para construir un sistema de investigación más justo e inclusivo, que aproveche al máximo el talento y la productividad de todos los científicos chilenos, sin importar su género.

    En síntesis, este estudio revela que a pesar del aumento en la participación de las mujeres en la academia, persisten desigualdades de género que afectan sus trayectorias profesionales en la investigación educativa en Chile. A través del análisis de datos de publicaciones científicas indexadas en Scopus, se evidenció una mayor probabilidad de deserción académica entre las mujeres, así como una menor productividad científica, reflejada en un menor número de artículos publicados. Las investigadoras también mostraron una menor propensión a la colaboración internacional en comparación con sus colegas hombres. Esta investigación, al ser pionera en abordar esta problemática en el contexto chileno, aporta evidencia crucial para la creación de políticas que fomenten la equidad de género en la academia. Las universidades y las instituciones que financian la investigación tienen la responsabilidad de implementar medidas que eliminen las barreras que enfrentan las mujeres y promuevan un ambiente de trabajo más justo e inclusivo. Es importante recordar que la ciencia no puede avanzar si excluye a la mitad de la población, pues la diversidad de perspectivas enriquece el conocimiento y permite abordar los desafíos de la sociedad de manera más efectiva.


    EQUIPO DE INVESTIGADORES

    AUTORES INSTITUCION
    Dra. Lorena Constanza Ortega Ferrand CIAE, Instituto de Estudios Avanzados en Educación, Universidad de Chile
    Carolina Guzmán-Valenzuela Facultad de Educación y Humanidades, Universidad de Tarapacá
    Matías Montero CIAE, Instituto de Estudios Avanzados en Educación, Universidad de Chile
    Diego Palacios
    1. Society and Health Research Center, Universidad Mayor
    2. Millennium Nucleus for the Evaluation and Analysis of Drug Policies
    3. Millennium Nucleus on Sociomedicine
    Francisca Ortiz Ruiz
    1. Centro de Economía y Políticas Sociales, Facultad de Ciencias Sociales y Artes, Universidad Mayor
    2. Millennium Institute for Care Research


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    Científicas chilenas ganan premio For Women in Science 2024
Dr. Sergio Lavandero González RE-Ang-(1-9). Nueva esperanza contra la hipertensión
Un retroenantiómero del péptido angiotensina-(1-9) [Ang-(1-9)] ha sido desarrollado como una prometedora alternativa para el tratamiento de la hipertensión arterial y el daño cardiovascular asociado. Denominada RE-Ang-(1-9), esta nueva molécula es el resultado de un trabajo conjunto entre investigadores de la Universidad de Chile y la Pontificia Universidad Católica de Chile. RE-Ang-(1-9) destaca por su mayor estabilidad en comparación con la molécula natural Ang-(1-9), lo que refuerza su potencial terapéutico como una opción más eficaz y segura frente a la hipertensión. Se prevé que su uso pueda disminuir las complicaciones cardiovasculares y mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes. No obstante, son necesarios estudios adicionales para confirmar su eficacia y seguridad en aplicaciones clínicas.

Un equipo de científicos chilenos de la Universidad de Chile y la Pontificia Universidad Católica de Chile, en colaboración con investigadores internacionales, ha desarrollado una nueva molécula para el tratamiento de la hipertensión arterial y la prevención de enfermedades cardiovasculares. La molécula, llamada retroenantiómero Ang-(1-9) [RE-Ang-(1-9)], es una versión modificada del péptido natural angiotensina-(1-9) [Ang-(1-9)], que se encuentra en el sistema renina-angiotensina (RAS). El RE-Ang-(1-9) ha demostrado ser más estable en el cuerpo humano y más eficaz para reducir la presión arterial, prevenir la hipertrofia cardíaca y regenerar el daño tisular causado por la hipertensión. Este descubrimiento, publicado en la revista Circulation, podría conducir a una nueva generación de fármacos antihipertensivos con menos efectos secundarios y mayor eficacia. Los investigadores ahora están trabajando para llevar el RE-Ang-(1-9) a ensayos clínicos en human.

Este importante hallazgo científico es el resultado de una colaboración multidisciplinaria que involucra a varios investigadores chilenos e internacionales.

  • Dr. Marcelo Javier Kogan.
    Investigador de la Universidad de Chile (UCH) y líder en el desarrollo del enfoque innovador del retroenantiómero Ang-(1-9) [RE-Ang-(1-9)].
  • Dr. Sergio Lavandero González
    También investigador de la UCH y parte del equipo que lidera el desarrollo del RE-Ang-(1-9). El Dr. Lavandero explica la importancia del sistema renina-angiotensina (RAS) en la regulación de la presión arterial y cómo su desregulación crónica puede causar hipertensión y otras enfermedades cardiovasculares.
  • Dra. Maria Paz Ocaranza Jeraldino
    Investigadora de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC). La Dra. Ocaranza resalta la importancia de laAng-(1-9) para prevenir la hipertrofia cardíaca y reducir la presión arterial. Además, destaca la mayor estabilidad del RE-Ang-(1-9) en comparación con la Ang-(1-9) natural. La Dra. Ocaranza también señala las limitaciones de los tratamientos actuales para la hipertensión, que solo logran reducir el daño cardiovascular asociado en un 50%. Enfatiza que el RE-Ang-(1-9) aparece como una solución prometedora con mayor estabilidad y eficacia que los tratamientos convencionales, lo que podría mejorar la adherencia de los pacientes al tratamiento al presentar menos efectos secundarios.
  • Además de estos protagonistas, el estudio contó con la participación de otros investigadores de Chile y el extranjero:
    * Investigadores de las Facultades de Ciencias, Químicas y Farmacéuticas y de Medicina de la Universidad de Chile.
    Investigadores de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y la Universidad Andrés Bello.
    * Científicos del Instituto de Ciencia y Tecnología de Barcelona (España), Monash University (Australia), University of Texas Medica Branch (Galveston, USA) y de la University of Texas Medical Center (Dallas, USA).
Este nuevo tratamiento potencial para la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares es fruto de un esfuerzo conjunto de investigadores de diferentes instituciones y países. La colaboración y el trabajo a largo plazo han sido claves para el éxito de este descubrimiento.
Es importante destacar que la investigación se desarrolló en el Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS) durante más de dos décadas.

El descubrimiento del retroenantiómero Ang-(1-9) [RE-Ang-(1-9)] como un potencial tratamiento para la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares se llevó a cabo principalmente en Chile. Específicamente, la investigación se desarrolló en el Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS). Este centro de investigación colaborativo, compuesto por científicos de la Universidad de Chile (UCH) y la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC), ha sido el escenario de más de dos décadas de trabajo conjunto que condujo a este importante hallazgo. Dentro de Chile, se destaca la participación de investigadores de las Facultades de Ciencias, Químicas y Farmacéuticas y de Medicina de la Universidad de Chile, así como de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y la Universidad Andrés Bello. Si bien el corazón de la investigación se situó en Chile, la colaboración internacional jugó un papel crucial en el éxito del proyecto. Equipos de investigación del Instituto de Ciencia y Tecnología de Barcelona (España), Monash University (Australia), University of Texas Southwestern Medica Branch (Galveston, USA) y de la University of Texas Medical Center (Dallas, USA) también contribuyeron al desarrollo y validación del RE-Ang-(1-9). Su participación en el modelamiento molecular y estudios de resonancia de plasmón de superficie fue fundamental para corroborar la eficacia del nuevo compuesto. En resumen, el descubrimiento del RE-Ang-(1-9) es un testimonio del potencial de la investigación científica colaborativa, tanto a nivel nacional como internacional. La sinergia entre científicos chilenos y extranjeros, con el ACCDIS como epicentro de la investigación, ha dado lugar a un avance prometedor en la lucha contra las enfermedades cardiovasculares.

La investigación científica que culminó con el desarrollo del retroenantiómero Ang-(1-9) [RE-Ang-(1-9)], un potencial tratamiento para la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares, no fue un evento repentino, sino el fruto de un extenso trabajo colaborativo que se extendió por más de dos décadas. Este hallazgo científico, representa un avance significativo en la lucha contra la hipertensión arterial y sus complicaciones, como el infarto de miocardio y la insuficiencia cardíaca. El desarrollo del RE-Ang-(1-9), una versión modificada del péptido natural angiotensina-(1-9) [Ang-(1-9)], se basó en la necesidad de superar la rápida degradación de laAng-(1-9) natural, lo que dificultaba su aplicación terapéutica. El equipo de investigación, conformado por científicos del Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS), la Universidad de Chile y la Pontificia Universidad Católica de Chile, junto a colaboradores internacionales, logró este hito científico tras un arduo proceso de investigación y desarrollo. La publicación del estudio en 2024 marca un momento crucial en esta larga trayectoria de investigación, abriendo nuevas posibilidades para el tratamiento de la hipertensión y la prevención de enfermedades cardiovasculares.

El desarrollo del retroenantiómero Ang-(1-9) [RE-Ang-(1-9)] tiene importantes implicaciones para el tratamiento de la hipertensión arterial y la prevención de enfermedades cardiovasculares. Este nuevo compuesto, al ser más estable y eficaz que la Ang-(1-9) natural, podría revolucionar el manejo de la hipertensión, una condición que afecta a millones de personas en todo el mundo. El Dr. Kogan, uno de los investigadores principales, señala que el RE-Ang-(1-9) no solo reduce la presión arterial de manera efectiva, sino que también posee la capacidad de regenerar los daños ocasionados por la hipertensión en los tejidos. Esta capacidad regenerativa, ausente en los tratamientos actuales, podría marcar un antes y un después en el abordaje de las enfermedades cardiovasculares. El impacto potencial del RE-Ang-(1-9) se extiende más allá del tratamiento individual, ya que podría reducir las complicaciones cardiovasculares a nivel poblacional, mejorando la calidad de vida de los pacientes y aliviando la carga sobre los sistemas de salud. A pesar de encontrarse en una fase inicial de desarrollo, el RE-Ang-(1-9) se perfila como una alternativa terapéutica prometedora que podría transformar el panorama de la salud cardiovascular en el futuro.

El propósito fundamental de la investigación sobre el retroenantiómero Ang-(1-9) [RE-Ang-(1-9)] es proporcionar una nueva y mejorada herramienta para combatir la hipertensión arterial y sus devastadoras consecuencias, las enfermedades cardiovasculares. Este hallazgo científico, centrado en el sistema renina-angiotensina (RAS), busca superar las limitaciones de los tratamientos actuales, como el enalapril y el candesartán, que, si bien buscan bloquear la acción de la angiotensina II, no logran una reducción completa del daño cardiovascular. El objetivo final es desarrollar un tratamiento más efectivo y seguro, capaz no solo de controlar la presión arterial, sino también de prevenir el infarto de miocardio, la insuficiencia cardíaca y otros daños a largo plazo en el corazón y los vasos sanguíneos. El RE-Ang-(1-9), al mostrar una mayor estabilidad y eficacia que su contraparte natural, la Ang-(1-9), y al tener menos efectos secundarios, tiene el potencial de transformar el tratamiento de la hipertensión y mejorar significativamente la salud cardiovascular de la población.

Inicialmente, los científicos del Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS) se centraron en el estudio del sistema renina-angiotensina (RAS), identificando el péptido natural Ang-(1-9) como un agente cardioprotector. Sin embargo, la rápida degradación de esta molécula en el organismo representaba un obstáculo para su aplicación terapéutica. Para superar esta limitación, los investigadores diseñaron una versión modificada del Ang-(1-9), el RE-Ang-(1-9), sustituyendo los aminoácidos de la serie L por su versión D, un proceso que aumenta su estabilidad en condiciones biológicas. "A diferencia del Ang-(1-9), el RE-Ang-(1-9) muestra una mayor estabilidad bajo condiciones biológicas", destaca la Dra. María Paz Ocaranza, investigadora de la PUC. La eficacia del RE-Ang-(1-9) se evaluó mediante modelamiento molecular, que permitió predecir su interacción con el receptor AT2R, crucial para su actividad terapéutica. Estas predicciones se confirmaron mediante estudios de resonancia de plasmón de superficie realizados en Chile y Estados Unidos. Los resultados experimentales demostraron que el RE-Ang-(1-9) mantiene las propiedades terapéuticas del Ang-(1-9) natural, actuando como un agente antihipertensivo y cardioprotector, pero con una mayor estabilidad y, por lo tanto, un mayor potencial terapéutico.

Los doctores Marcelo Kogan y Sergio Lavandero, líderes de la investigación sobre el retroenantiómero Ang-(1-9) [RE-Ang-(1-9)] en la Universidad de Chile, destacan el potencial de este hallazgo científico para revolucionar el tratamiento de la hipertensión arterial y las enfermedades cardiovasculares. "El retroenantiómero Ang-(1-9) representa un avance importante en la lucha contra las enfermedades cardiovasculares, al ser más estable y seguro que su versión natural", afirma el doctor Kogan. Este nuevo tratamiento podría superar las limitaciones de las terapias actuales, que a menudo presentan efectos secundarios. La Dra. María Paz Ocaranza, investigadora de la Pontificia Universidad Católica de Chile, resalta la importancia de este descubrimiento para mejorar la salud de las personas. "A diferencia delAng-(1-9), el RE-Ang-(1-9) muestra una mayor estabilidad bajo condiciones biológicas", destaca la doctora Ocaranza. A pesar del gran avance que representa el RE-Ang-(1-9), los expertos coinciden en que aún se encuentra en una fase inicial de desarrollo.

Si bien el descubrimiento del retroenantiómero Ang-(1-9) [RE-Ang-(1-9)] abre nuevas posibilidades para el tratamiento de la hipertensión arterial y la prevención de enfermedades cardiovasculares, la investigación se encuentra aún en una fase preliminar. El Dr. Kogan, uno de los investigadores principales, enfatiza la necesidad de continuar con los estudios preclínicos. "Para su posible aplicación clínica, primero se requerirá realizar diversos estudios en animales mayores y evaluar efectividad y toxicidad", explica el Dr. Kogan. Estos estudios permitirán determinar la dosis óptima del RE-Ang-(1-9), evaluar su seguridad a largo plazo y confirmar su eficacia en modelos animales más complejos. Una vez superada esta etapa, se podrá avanzar hacia la fase clínica en humanos, donde se realizarán ensayos controlados para determinar la eficacia y seguridad del RE-Ang-(1-9) en pacientes con hipertensión arterial. La obtención del financiamiento necesario para llevar a cabo estas investigaciones será crucial para que este tratamiento cardiovascular innovador pueda llegar a beneficiar a los pacientes en el futuro.

Este artículo de investigación científica, publicado en la prestigiosa revista Circulation de la American Heart Association, describe un avance prometedor en la lucha contra la hipertensión arterial y las enfermedades cardiovasculares. Investigadores chilenos, en colaboración con equipos internacionales, han desarrollado el retroenantiómero Ang-(1-9) [RE-Ang-(1-9)], una molécula que ofrece una alternativa más estable y eficaz a la Ang-(1-9) natural, un péptido terapéutico con propiedades cardioprotectoras, pero limitado por su rápida degradación en el organismo. El estudio ha demostrado, mediante modelamiento molecular y estudios de resonancia de plasmón de superficie, que el RE-Ang-(1-9) interactúa eficazmente con el receptor AT2R, clave para su acción terapéutica. Aunque la investigación aún se encuentra en una fase inicial, los resultados obtenidos hasta ahora son alentadores y sugieren que el RE-Ang-(1-9) podría convertirse en un tratamiento cardiovascular innovador, capaz no solo de reducir la presión arterial, sino también de prevenir el daño cardiovascular a largo plazo, incluyendo el infarto de miocardio y la insuficiencia cardíaca. Se requieren más estudios en animales mayores para evaluar la seguridad y eficacia del RE-Ang-(1-9) antes de que pueda ser probado en humanos. La comunidad científica mira con optimismo el futuro de esta investigación, que podría transformar el abordaje de la hipertensión arterial y mejorar la salud cardiovascular de la población. El presente trabajo es un reflejo de la alta importancia que tiene la colaboración internacional y la búsqueda constante de soluciones para los grandes desafíos de salud pública.


EQUIPO DE INVESTIGADORES

AUTORES INSTITUCION
Dr. Yvo Flores
  1. Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS).
  2. Facultad Ciencias Químicas y Farmacéuticas & Facultad Medicina. Universidad de Chile
  3. Centro de Modelamiento Molecular, Biofísica y Bioinformática (CM2B2). Universidad de Chile
BSc. Gerald Zapata-Torres
  1. Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS).
  2. Facultad Ciencias Químicas y Farmacéuticas & Facultad Medicina. Universidad de Chile
  3. Centro de Modelamiento Molecular, Biofísica y Bioinformática (CM2B2). Universidad de Chile
BSc. Douglas J. Matthies Facultad Ciencias Químicas y Farmacéuticas. Universidad de Chile
MD. Larissa Alemán
  1. Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS).
  2. Facultad Ciencias Químicas y Farmacéuticas & Facultad Medicina. Universidad de Chile
  3. Centro de Modelamiento Molecular, Biofísica y Bioinformática (CM2B2). Universidad de Chile
Dr. Carolina Hernández-Fuentes
  1. Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS).
  2. Facultad Ciencias Químicas y Farmacéuticas & Facultad Medicina. Universidad de Chile
  3. Centro de Modelamiento Molecular, Biofísica y Bioinformática (CM2B2). Universidad de Chile
Dra. Gina Sánchez Instituto de Ciencias Biomédicas (ICBM), Facultad Medicina, Universidad de Chile
Dra. Eyleen Araya Departamento de Ciencias Químicas, Facultad de Ciencias Exactas, Universidad Andres Bello
Dra. Fanny Guzman Núcleo de Biotecnología de Curauma (NBC), Pontificia Universidad Católica de Valparaíso
Dra. Zully Pedrozo
  1. Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS).
  2. Facultad Ciencias Químicas y Farmacéuticas & Facultad Medicina. Universidad de Chile
  3. Centro de Modelamiento Molecular, Biofísica y Bioinformática (CM2B2). Universidad de Chile
  4. Instituto de Ciencias Biomédicas (ICBM), Facultad Medicina, Universidad de Chile
Dr. Salvador Guardiola
  1. Institute for Research in Biomedicine (IRB Barcelona)
  2. Institute of Science and Technology (BIST)
Dra. Mónica Varese
  1. Institute for Research in Biomedicine (IRB Barcelona)
  2. Institute of Science and Technology (BIST)
Dr. Ernest Giralt
  1. Institute for Research in Biomedicine (IRB Barcelona)
  2. Institute of Science and Technology (BIST)
  3. Department of Inorganic and Organic Chemistry, University of Barcelona
Dr. Ivan Maslov
  1. Department of Pharmacology, Monash University
  2. Cardiovascular Disease Program, Biomedicine Discovery Institute, Monash University
Dr. Mark Del Borgo
  1. Department of Pharmacology, Monash University
  2. Cardiovascular Disease Program, Biomedicine Discovery Institute, Monash University
Dr. Robert E. Widdop
  1. Department of Pharmacology, Monash University
  2. Cardiovascular Disease Program, Biomedicine Discovery Institute, Monash University
Dra. Silvana Valdebenito Australia. Department of Neurobiology, University of Texas Medical Branch (UTMB)
Dr. Eliseo A. Eugenin Australia. Department of Neurobiology, University of Texas Medical Branch (UTMB)
Dr. Mario Chiong
  1. Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS).
  2. Facultad Ciencias Químicas y Farmacéuticas & Facultad Medicina. Universidad de Chile
  3. Centro de Modelamiento Molecular, Biofísica y Bioinformática (CM2B2). Universidad de Chile
Dr. Joseph A. Hill
  1. Department of Internal Medicine (Cardiology Division), University of Texas Southwestern Medical Cente
  2. Department of Molecular Biology, University of Texas Southwestern Medical Cente
  3. Harry S. Moss Heart Center, University of Texas Southwestern Medical Cente
Dra. María Paz Ocaranza
  1. Advanced Center for Chronic Diseases (ACCDiS), Facultad Medicina, Pontificia Universidad Católica de Chil
  2. Center of New Drugs for Hypertension and Heart Failure (CENDHY),
  3. División de Enfermedades Cardiovasculares, Pontificia Universidad Católica de Chile, Universidad de Chile, and Universidad Andrés Bello
Dr. Marcelo J. Kogan
  1. Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas (ACCDIS).
  2. Facultad Ciencias Químicas y Farmacéuticas & Facultad Medicina. Universidad de Chile
  3. Centro de Modelamiento Molecular, Biofísica y Bioinformática (CM2B2). Universidad de Chile
Dr. Sergio Lavandero González
  1. Advanced Center for Chronic Diseases (ACCDiS), Facultad Ciencias Químicas y Farmacéuticas & Facultad Medicina. Universidad de Chile
  2. Centro de Modelamiento Molecular, Biofísica y Bioinformática (CM2B2). Universidad de Chile
  3. Instituto de Ciencias Biomédicas (ICBM), Facultad Medicina (G.S., Z.P., S.L.), Universidad de Chile
  4. Department of Internal Medicine (Cardiology Division), University of Texas Southwestern Medical Cente


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For Woman in Science 2024 Científicas chilenas ganan premio For Women in Science 2024
El Premio For Women in Science Chile 2024, otorgado por L'Oréal y UNESCO, fue concedido a dos destacadas científicas chilenas. La diseñadora industrial, Mg. Valeria Bravo Carrasco, fue reconocida por su investigación en el desarrollo de una calza inteligente que busca mejorar la movilidad de adultos mayores. Por otro lado, la oceanógrafa Dra. Lucía Villar Muñoz fue galardonada por su trabajo en geofísica marina, específicamente en la exploración de hidratos de gas y su impacto en el cambio climático. El premio, que celebra su 17ª edición en Chile, busca visibilizar la investigación científica de las mujeres, inspirando a las futuras generaciones en las carreras STEM.


La Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), junto a L'Oréal y UNESCO, otorgaron el premio For Women in Science Chile 2024 a dos investigadoras. Este galardón, que busca promover la participación de las mujeres en la ciencia, reconoció a Mg. Valeria Bravo Carrasco, diseñadora industrial de la Universidad de Talca, y a Dra. Lucía Villar Muñoz, oceanógrafa de la Universidad de Chile. Ambas científicas fueron seleccionadas entre más de 120 candidatas por la calidad de sus proyectos de investigación. El premio busca destacar el rol de la mujer en la ciencia, inspirando a las futuras generaciones a seguir carreras STEM. Este programa ha apoyado a más de 4.100 investigadoras a nivel mundial desde 1998.

Las ganadoras del premio For Women in Science Chile 2024, en la categoría postdoctorado y doctorado, son Lucía Villar y Valeria Bravo, respectivamente. Lucía Villar, investigadora del Departamento de Geofísica de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, es licenciada en Oceanografía y doctora en Ciencias Naturales. Su trabajo de investigación se centra en la geofísica marina, específicamente en la exploración de hidratos de gas. Valeria Bravo, por su parte, es diseñadora industrial de la Universidad de Talca con un magíster en Ergonomía de la Universidad de Concepción y en Diseño de la Universidad de Girona. Actualmente, se encuentra realizando su doctorado en Sistemas de Ingeniería.

El premio For Women in Science Chile 2024, entregado por L’Oréal Groupe en conjunto con la UNESCO y la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), reconoce la labor de mujeres científicas que desarrollan sus investigaciones en Chile. Valeria Bravo, ganadora en la categoría doctorado, realiza su trabajo en la Universidad de Talca. Su proyecto se centra en mejorar la calidad de vida de los adultos mayores a través de una calza inteligente. Por otro lado, Lucía Villar, ganadora en la categoría postdoctorado, se desempeña en el Departamento de Geofísica de la Universidad de Chile, donde desarrolla su investigación sobre hidratos de gas y su impacto en el cambio climático. El enfoque de ambas investigaciones, si bien diverso, tiene como escenario principal Chile..

El anuncio de las ganadoras del premio For Women in Science Chile 2024, otorgado por L’Oréal Groupe, UNESCO y ANID, se realizó en mes octubre de 2024. En esta edición, el premio reconoció la destacada labor de las científicas chilenas Valeria Bravo Carrasco, magíster en Ingeniería, y Lucía Villar Muñoz, doctora en Ciencias Naturales. Diversos medios de comunicación publicaron la noticia el 16 de octubre de 2024, y la página web de la UNESCO lo anunció el 23 de octubre. El programa For Women in Science, con 17 años de trayectoria en Chile, busca visibilizar el rol de la mujer en la ciencia a través del reconocimiento de la investigación científica de alto nivel. Esta iniciativa, respaldada por el Observatorio Europeo Austral (ESO), ha reconocido a más de 4.000 mujeres a nivel mundial, entre ellas siete laureadas con el Premio Nobel.

El premio For Women in Science Chile es crucial para el desarrollo científico del país. No solo visibiliza la investigación científica de alto nivel realizada por mujeres científicas, sino que también inspira a las nuevas generaciones a seguir carreras STEM, un campo donde la presencia femenina aún es minoritaria. “Las niñas y mujeres enfrentan estereotipos que limitan su acceso a la educación STEM y muchas veces su trabajo no recibe el reconocimiento que merece”, afirma Esther Kuisch Laroche, directora de la Oficina Regional de la UNESCO para América Latina y el Caribe. FWiS busca romper estas barreras, creando modelos a seguir y demostrando que la ciencia necesita mujeres. La participación de instituciones como ANID y ESO, además del apoyo de L’Oréal y la UNESCO, consolida la relevancia del premio en Chile, impulsando la creación de una comunidad científica más inclusiva y diversa.

El objetivo final del premio For Women in Science Chile, más allá de reconocer la investigación científica, es impulsar el desarrollo de la ciencia al derribar las barreras de género y fomentar la participación de las mujeres en carreras STEM. Se busca crear una comunidad científica más inclusiva y diversa donde el talento femenino tenga el espacio y el reconocimiento que merece. A través de la visibilización de las científicas galardonadas, el programa aspira a inspirar a las nuevas generaciones, especialmente a niñas y jóvenes, a elegir carreras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. FWiS contribuye a la construcción de un futuro donde la ciencia se nutra de la diversidad de talentos, impulsando el avance científico en beneficio de toda la sociedad.

La selección de las ganadoras del premio For Women in Science Chile 2024 involucró un proceso de evaluación riguroso. La Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), como socio estratégico, jugó un rol clave en la postulación y evaluación de las candidaturas. Las científicas que aspiraban al premio, debieron presentar sus proyectos de investigación científica, detallando la metodología, diseño experimental y análisis de datos utilizados. Un comité de expertos en diversas áreas STEM evaluó la calidad y el impacto potencial de las investigaciones, así como la trayectoria de las candidatas. Este proceso transparente y basado en el mérito científico, permitió seleccionar a Valeria Bravo y Lucía Villar, dos destacadas científicas que contribuyen al avance del conocimiento en sus respectivas áreas.

Diversas autoridades en el ámbito científico han destacado el valor del premio For Women in Science Chile. Magdalena Zapata, directora general de L’Oréal Groupe en Chile, subraya la convicción de la compañía de que "el mundo necesita ciencia y la ciencia necesita mujeres". Por su parte, Alejandra Pizarro, directora nacional de ANID, celebra la contribución de la agencia a esta iniciativa, "que destaca el desempeño de las mujeres en investigación". Pizarro enfatiza el compromiso de ANID con una ciencia más diversa, reconociendo "el aporte fundamental que realizan nuestras científicas". Finalmente, Luis Chavarría Garrido, representante del Observatorio Europeo Austral (ESO) en Chile, señala que "el avance de las mujeres en ciencia ha sido una prioridad para ESO". El respaldo de estas instituciones y la contundencia de las declaraciones de sus representantes, confirman la relevancia de FWiS para impulsar la participación femenina en la ciencia chilena.

Tras el anuncio de las ganadoras, Valeria Bravo y Lucía Villar, el programa For Women in Science Chile continuará apoyando sus proyectos de investigación científica. Ambas científicas recibirán financiamiento para sus estudios, además de acceso a capacitaciones y formaciones complementarias. "Ellas se integran a una red de 4 mil científicas que han ganado este premio internacionalmente, en donde a través de una especie de intranet científica junto con la UNESCO y la fundación van a tener acceso a un montón de capacitaciones y formaciones que son complementarias a la científica", explicó Marcela Siri, directora de Asuntos Corporativos, Engagement & Sostenibilidad en L’Oréal Groupe Chile. La iniciativa, que busca visibilizar el rol de la mujer en la ciencia, seguirá trabajando para inspirar a futuras generaciones y promover la participación femenina en carreras STEM, construyendo una comunidad científica más diversa e inclusiva en Chile.

El premio For Women in Science Chile 2024, otorgado a Valeria Bravo y Lucía Villar, marca un hito en la investigación científica nacional. Este galardón no solo reconoce la excelencia de sus proyectos en áreas STEM como la ergonomía y la geofísica marina, sino que también simboliza el compromiso de Chile con la inclusión y la diversidad en la ciencia. FWiS, con el apoyo de instituciones como L'Oréal, UNESCO, ANID y ESO, se consolida como un motor para derribar barreras de género e inspirar a las futuras generaciones de científicas. Las palabras de Lucía Villar, “Este premio viene como anillo al dedo para demostrar a las y los chilenos que en nuestro país hay buenas científicas e investigadoras que hacemos nuestro trabajo con amor para aportar al conocimiento y nos desvelamos por crecer día a día, profesionalmente”, resuenan como un llamado a la acción para construir un futuro donde la ciencia chilena se nutra del talento de todas y todos.

 

EQUIPO DE INVESTIGADORES

 

AUTORES INSTITUCION
Mg. Valeria Bravo Carrasco Pontificia Universidad Católica de Chile
Dra. Lucía Villar Muño Universidad de Chile

 

 

 

 

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Jhonatan Alarcón-Muñoz, Científico Chileno Dinosaurio Iguanodontiano del Cretácico Temprano en Chile
Un importante hallazgo paleontológico ha sido realizado en el Desierto de Atacama, Chile. Se trata de una vértebra caudal descubierta en 1988 en Cerro La Isla. Esta vértebra ha sido identificada como perteneciente a un dinosaurio iguanodontiano del Cretácico temprano. Este descubrimiento constituye la evidencia ósea más antigua de la presencia de estos ornitópodos en Chile. Investigadores de la Red Paleontológica de la Universidad de Chile llevaron a cabo un análisis morfológico de la vértebra. El estudio, publicado en la revista científica Cretaceous Research, sugiere que el dinosaurio vivió hace aproximadamente 140 millones de años. Este hallazgo arroja luz sobre la diversidad de iguanodontianos en el margen pacífico de Sudamérica durante el Cretácico temprano. Los resultados del análisis sugieren que la vértebra perteneció a un iguanodontiano no hadrosauroide. El espécimen se asemeja más a dinosaurios como el Iguanodon, un dinosaurio bípedo que ocasionalmente usaba sus cuatro extremidades para caminar. Este descubrimiento es particularmente relevante debido a la escasez de restos fósiles de iguanodontianos del Cretácico temprano en Sudamérica. La mayoría de los registros de este período consisten en huesos aislados y fragmentarios. Este hallazgo, aunque fragmentario, contribuye a una mejor comprensión de la evolución y biogeografía de estos dinosaurios en Gondwana.

En el Desierto de Atacama, específicamente en Cerro La Isla, se descubrió una vértebra caudal perteneciente a un dinosaurio iguanodontiano del Cretácico temprano. El hallazgo permaneció resguardado en el Museo Nacional de Historia Natural de Chile hasta que un equipo de investigadores de la Universidad de Chile, liderado por Jhonatan Alarcón Muñoz, la estudió. A través de un análisis morfológico, los científicos confirmaron que la vértebra pertenece a un iguanodontiano. "Esta vértebra representa uno de los restos óseos de dinosaurios ornitópodos más antiguos que hemos descrito en Chile", afirmó Alarcón Muñoz. Este descubrimiento es significativo porque aporta información valiosa sobre la evolución de los iguanodontianos en el margen pacífico de Sudamérica durante el Cretácico temprano, un período con escasos registros fósiles de estos animales.

Jhonatan Alarcón Muñoz, investigador de la Red Paleontológica de la Universidad de Chile, lidera el equipo responsable del análisis e identificación de la vértebra caudal del dinosaurio iguanodontiano del Cretácico temprano. A este equipo se suman:

  • Investigadores del Museo Nacional de Historia Natural
  • Investigadores del Núcleo Milenio de Transiciones Evolutivas Tempranas de Mamíferos (EVOTEM).
  • Académicos de la Universidad de La Luguna
  • Académicos de la Universidad de Zaragoza
  • Académicos de la Universidad de Valparaiso
  • Académicos del Museo Mineralógico, Universidad de Atacama
  • Investigadores del Atacama Fósil Research
  • Investigadores de la Consultora Geosaurus
El Museo Nacional de Historia Natural de Chile ha sido el custodio de la vértebra desde su descubrimiento, permitiendo que este importante fósil pueda ser estudiado y contribuya al conocimiento de la paleontología en Chile.

Un equipo de investigadores chilenos ha descubierto una vértebra caudal de dinosaurio iguanodontiano en Cerro La Isla, ubicado en el Desierto de Atacama, Región de Atacama, al norte de Chile. Este hallazgo, realizado en los afloramientos de la Formación Quebrada Monardes, una unidad geológica del Cretácico Inferior, amplía el conocimiento sobre la paleontología de dinosaurios en Gondwana. El análisis morfológico de la vértebra, que data de aproximadamente 140 millones de años, ha permitido clasificarla como perteneciente a un dinosaurio iguanodontiano. La Formación Quebrada Monardes también ha proporcionado fósiles de otros animales, como pterosaurios ctenochasmatidos. Este descubrimiento aporta información crucial para la investigación científica sobre la evolución de los iguanodontianos en el margen suroccidental de este antiguo supercontinente.

El descubrimiento de la vértebra de un dinosaurio iguanodontiano se remonta a 1988. En ese año, los paleontólogos Manuel Suárez y Larry Marshall encontraron este fósil en el Cerro La Isla, en el Desierto de Atacama. Desde entonces, la vértebra permaneció resguardada en el Museo Nacional de Historia Natural. Recientemente, un equipo de investigadores chilenos, liderados por Jhonatan Alarcón Muñoz, analizó la vértebra, confirmando su pertenencia a un iguanodontiano del Cretácico temprano. Este hallazgo representa la evidencia más antigua de la presencia de este tipo de dinosaurios en el margen pacífico de Sudamérica. Si bien la datación precisa de la vértebra es incierta, los científicos estiman que el dinosaurio al que perteneció vivió hace aproximadamente 140 millones de años. Este descubrimiento es crucial para la paleontología, ya que los fósiles de iguanodontianos del Cretácico temprano en Sudamérica son escasos.

El descubrimiento de esta vértebra de dinosaurio iguanodontiano en el Cretácico temprano de Chile tiene importantes implicaciones para la paleontología:

  • En primer lugar, Alarcón determina que: "constituyen un pequeño aporte que nos permitirá entender un poco mejor cómo fue la diversidad de estos dinosaurios en Sudamérica durante la primera parte del Cretácico”. Los fósiles de iguanodontianos de este periodo son escasos en Sudamérica, por lo que este hallazgo permite comprender mejor la evolución de estos dinosaurios en el margen pacífico del antiguo supercontinente de Gondwana.
  • En segundo lugar, su estudio arroja luz sobre la fauna que habitó el territorio chileno durante el Cretácico temprano, un periodo con escasos registros fósiles en el país.
  • Finalmente, el hallazgo demuestra la riqueza paleontológica de Chile, incentivando futuras investigaciones científicas en la región. La comparación de esta vértebra con la de otros iguanodontianos, incluyendo hadrosaurios, es crucial para completar el análisis morfológico y determinar sus afinidades taxonómicas.

La investigación en torno a la vértebra del dinosaurio iguanodontiano hallada en Cerro La Isla busca comprender mejor la evolución y diversidad de estos animales en Sudamérica durante el Cretácico temprano. El análisis de este fósil, junto con la comparación con otros iguanodontianos, incluyendo hadrosaurios, permitirá reconstruir la historia biogeográfica de estos dinosaurios en el margen suroccidental de Gondwana. Además, la investigación pretende profundizar el conocimiento sobre la fauna del Cretácico temprano en Chile, un periodo con escasos registros fósiles en el país. El estudio de esta vértebra aportará valiosa información para la paleontología de dinosaurios en Gondwana y sentará las bases para futuras investigaciones científicas en la región.

El proceso de investigación de la vértebra del dinosaurio iguanodontiano comenzó con su descubrimiento en 1988 por los paleontólogos Manuel Suárez y Larry Marshall. La vértebra, procedente de la Formación Quebrada Monardes en Cerro La Isla, fue resguardada en el Museo Nacional de Historia Natural. Años más tarde, el equipo de investigadores chilenos liderado por Jhonatan Alarcón Muñoz la seleccionó para su estudio. La metodología incluyó una limpieza inicial del fósil para eliminar restos de roca. Posteriormente, se realizó un análisis morfológico de la vértebra, identificando rasgos característicos de los iguanodontianos, como "el contorno subhexagonal de las caras articulares, el perfil rectangular en vista lateral y la ausencia de procesos transversales por debajo de la sutura neurocentral". Para complementar el análisis, se llevaron a cabo análisis estadísticos, utilizando medidas de la vértebra, para compararla con otros iguanodontianos, incluyendo hadrosaurios. Estos análisis permitieron determinar las posibles afinidades del espécimen y aportar información sobre la diversidad de iguanodontianos en el Cretácico temprano de Sudamérica.

Este hallazgo permite a los científicos chilenos estudiar la fauna que habitó el territorio chileno durante el Cretácico temprano, un periodo con escasos fósiles en el país. La investigación científica de esta vértebra abre nuevas vías para el estudio de la evolución de los iguanodontianos en el margen pacífico de Gondwana. Esta región presenta escasos registros fósiles de este periodo, lo que resalta la importancia de este descubrimiento para la paleontología de dinosaurios.

Tras el importante hallazgo de la vértebra de dinosaurio iguanodontiano en Cerro La Isla, los investigadores chilenos continuarán explorando la zona en busca de nuevos fósiles. El equipo de la Red Paleontológica de la Universidad de Chile, liderado por Jhonatan Alarcón Muñoz, se enfocará en la Formación Quebrada Monardes, donde se descubrió la vértebra. El objetivo es encontrar más fósiles de iguanodontianos que permitan comprender mejor la diversidad de estos animales en el Cretácico temprano de Chile. Las futuras expediciones se centrarán en la búsqueda de restos óseos más completos, que permitan identificar nuevas especies y profundizar el estudio de la evolución de los iguanodontianos en el margen pacífico de Gondwana.

El descubrimiento de una vértebra de dinosaurio iguanodontiano en el Cerro La Isla, Chile, arroja luz sobre la diversidad de estos ornitópodos en Sudamérica durante el Cretácico temprano. El análisis morfológico de la vértebra, junto con análisis estadísticos comparativos, han permitido clasificarla como perteneciente a un iguanodontiano no hadrosaurio. Este fósil, uno de los más antiguos de su tipo en Chile, abre nuevas vías de investigación sobre la evolución de los iguanodontianos en el margen pacífico de Gondwana, una región con escasos registros fósiles de este periodo. A medida que los científicos chilenos continúen explorando la Formación Quebrada Monardes, se espera que nuevos hallazgos permitan reconstruir con mayor precisión la historia de estos fascinantes animales. Como reflexiona Jhonatan Alarcón Muñoz, "En realidad hay una riqueza paleontológica muy grande en el país. Ahora hay mucha más gente dispuesta a buscar los restos de dinosaurios y otros animales extintos". Esta afirmación nos invita a reflexionar sobre la importancia de la paleontología para comprender nuestro pasado y la necesidad de continuar apoyando la investigación científica en esta área.


EQUIPO DE INVESTIGADORES

AUTORES INSTITUCION
Jhonatan Alarcón-Muñoz
  1. Área de Paleontología, Museo Nacional de Historia Natural
  2. Millennium Nucleus Early Evolutionary Transitions of Mammals
  3. Red Paleontológica Universidad de Chile
Penélope Cruzado-Caballero
  1. Área de Paleontología, Facultad de Ciencias, Universidad de La Laguna
  2. Grupo Aragosaurus-IUCA, Facultad de Ciencias, Universidad de Zaragoza
Omar Vicencio Campos
  1. Programa de Magíster en Ciencias Biológicas mención Biodiversidad y Conservación, Facultad de Ciencias, Universidad de Valparaíso,
  2. Museo Seminario Valparaíso (MSV)
Claudio Bravo-Ortiz
  1. Millennium Nucleus Early Evolutionary Transitions of Mammals
  2. Red Paleontológica Universidad de Chile
Erick Vargas Bugueño Museo Mineralógico, Universidad de Atacama
Dániel Bajor
  1. Millennium Nucleus Early Evolutionary Transitions of Mammals
  2. Red Paleontológica Universidad de Chile
Mario E. Suárez
  1. Red Paleontológica Universidad de Chile
  2. Atacama Fósil Research
Juan Pablo Guevara Consultora Geosaurus
Alexander O. Vargas
  1. Millennium Nucleus Early Evolutionary Transitions of Mammals
  2. Red Paleontológica Universidad de Chile
David Rubilar-Rogers Área de Paleontología, Museo Nacional de Historia Natural




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